Las ETS, siglas de Enfermedades de Transmisión Sexual, son los virus o infecciones
que se transmiten mediante el intercambio de fluidos o incluso en contacto genital, que existe en
las relaciones sexuales, también por compartir juguetes sexuales, aunque eso no significa que no se
puedan transmitir de más formas. Muchas de estas enfermedades se pueden transmitir por la
sangre.
Aunque pueda parecer que el riesgo de contraer estas enfermedades es bajo, lo
cierto es que su incidencia en la población es bastante alta, solo que la mayoría de las personas
que las padecen evitan habla de ello por temor o vergüenza.
Las enfermedades de transmisión sexual o
ETS
más frecuentes son las siguientes:
Papiloma humano
Es un virus que se presenta en la zona genital en forma de verrugas y se
relaciona con el cáncer de útero si el virus persiste, lo que ocurre entre el 5 y el 10% de las
veces.
El virus del papiloma humano no solo se puede contagiar por vía sexual, aunque
es lo más común.
Se reconocen más de 100 cepas de este virus, aunque no todos presentan riesgo de
desarrollar cáncer en el futuro. Debido a esto, es conveniente que las mujeres acudan al
especialista para realizar exploraciones (citologías) y analizar si existe presencia del
virus.
Gonorrea
La gonorrea está causada por una bacteria que se multiplica fácilmente en las
zonas húmedas del cuerpo. Entre ellas, los genitales, el ano, los ojos, la garganta o la boca. Sus
síntomas más comunes son el sangrado vaginal inusual, secreciones vaginales inusuales, o dolor en
el abdomen en el caso de la mujer. En el caso del hombre, los síntomas más comunes son dolor al
orinar u orina con pus.
Sin tratamiento, esta enfermedad puede causar la esterilidad.
Clamidia
La clamidia es una infección que muchas veces no manifiesta ningún síntoma. O
estos son menores, en mujeres estos síntomas pueden ser dolor durante las relaciones o al orinar;
en los hombres dolor en los testículos al orinar u orina blanquecina.
Si no se detecta puede causar dolor pélvico crónico y esterilidad.
Sífilis
La Sífilis es una enfermedad de transmisión sexual causada por una bacteria bien
adaptada a los ambientes húmedos como las mucosidades de los genitales, el ano y la boca, que se
transmite por las heridas abiertas. Cuando las heridas de la sífilis son visibles, se puede
contagiar con el simple contacto con ellas. Durante el principio de la enfermedad el contagio no es
tan fácil, pero ocurre frecuentemente debido a que no se siente dolor y la persona puede permanecer
ajena a su afección. El primer síntoma de sífilis es la aparición de yagas. Se cree que si la
sífilis no está bien tratada, puede desembocar en trastornos neurológicos, mentales y cardíacos
entre otros, aunque ya no pueda contagiar la bacteria.
Virus de la inmunodeficiencia humano o VIH
Este virus es el causante del sida. Disminuye la fortaleza del sistema
inmunitario, por lo que las personas que la padecen son más vulnerables a las infecciones. Sin
embargo, el solo contagio del VIH no garantiza que la persona desarrolle el sida, pero sí puede
contagiarlo. Por lo que aunque no se muestren síntomas, es conveniente realizarse pruebas
periódicas. Actualmente, la mortalidad del sida ha disminuido mucho gracias al avance de los
medicamentos.
Los primeros síntomas del sida pueden parecer síntomas de la gripe, siendo una
enfermedad que avanza lentamente.
Candidiasis
La candidiasis es una infección producida por un hongo de la especie
Candida que una vez contagiado vive en las áreas genitales y su propagación puede verse
favorecida por el uso de ropa antitranspirable y ajustada. Puede no haber síntomas y existen muchos
tratamientos con éxito.
Herpes genital
El herpes genital es un virus que no tiene cura, tan solo antibióticos que
pueden controlarlo, al igual que el herpes bucal. En ocasiones, las personas que presentan herpes
tendrán úlceras alrededor de los genitales, seguidos de periodos en los que le virus no se
manifieste.
Se debe tener especial cuidado en caso de embarazo.
Ladillas
Las ladillas son un tipo de piojos que se encuentran en el vello púbico, aunque
también se pueden encontrar en más zonas. No es necesario mantener relaciones sexuales para su
contagio, siendo común contagiarse por compartir toallas o en piscinas.
Sarna
Es otra enfermedad causada por parásitos. Pueden depositarse en muchas zonas del
cuerpo, siendo habitual su contagio por vía sexual, aunque también por otros contactos. Debido a
que el parásito sobrevive hasta 72 horas después de abandonar el cuerpo humano, se puede encontrar
en ropa, toallas, etc. Los síntomas de la sarna son picores e irritación, se cura mediante cremas y
lavando con agua muy caliente todos los tejidos con los que haya estado en contacto.
Cómo prevenir las enfermedades de transmisión sexual
Para evitar el contagio de
ETS,
se recomienda un uso correcto del preservativo, dejando un espacio en el extremo para la
eyaculación, y utilizando una talla adecuada, entre otras recomendaciones que se especifican en el
apartado «preservativo masculino»
y «preservativo femenino»
de esta misma web.
Si te has contagiado de una ETS, además de seguir un tratamiento médico, es
recomendable contactar con tus últimas parejas sexuales para prevenir la expansión de la ETS. |